jueves, 16 de abril de 2015

pompas, baños y sueños

A veces uno se olvida el gran placer que es bañarse.. a mi me pasa mucho. No, no no es que sea una marraner, es que no me baño, me ducho porque la conciencia de llenar la bañera de agua duele, duele mucho. Pero confieso que alguna vez cuando vengo reventada de correr lo hago, si, mea culpa.. es una buena manera de rematar la jugada y seguir teniendo un ratito para mi aunque siempre aparece algún klingon...

La última vez que me bañe cerré los ojos fuerte porque tenía que hacer una ilustración sobre el mundo jabón... La Jabonería de Suval me había encargado una ilustración y quería empaparme del asunto... Dan cursos, talleres y venden todo tipo de materiales necesarios para hacer el jabón o comprarlos ya hechos por Susana. Aceites esenciales, pigmentos, tarros, tinturas, vitaminas, glicerina, moldes... pero yo lo único que tenía era jabón para niños, que es el olor que me gusta a mi, el tipo nenuco... es el único perfume que aguanto, lo demás me agobian y me dan calor y me vuelven un poco loca y pienso que soy una vieja que atufa el ascensor si me lo echo.. Asi que cerré los ojos fuerte, muy fuerte para concentrarme que si no me despisto y soñé que me bañaba así con mucho glamour y esta es la ilustración que les hice... Es una pena no tener la capacidad de estirar el tiempo y hacerme un cursito tambíen de estos...